El siguiente texto escrito por Roberto Rosique nos da una visión más amplia de la obra de Helga Krebs:
“Artista que atraviesa por una de las etapas más ricas de la experiencia creativa: ‘La madurez’. Nos ofrece una obra actual, alejada de la contaminación comercial que deja ver un futuro de justo reconocimiento. No obstante esa definición –jamás laudatoria- sigue imperando en su persona, la sencillez que siempre le ha caracterizado… Helga pinta sus pensamientos con tal afinidad, que sólo el persistente ejercicio, el abreviar a otras expresiones culturales, el convencimiento de lo imperativo de la buena voluntad sobre la necedad, enriquecido todo ello, por una vida que ha recorrido senderos difíciles entre la represión y la amistad, el amor y el odio, la riqueza y la pobreza, que han sido sus instrumentos para lograrlo… El dibujo es el sustento que da pie a la obra colorida de Helga, cada trazo está exactamente donde planeó estarlo sin caer jamás en la rigidez automática, metamorfosea sus imágenes que van emergiendo con sutileza el carácter que desea defina la composición. La autora enriquece con frecuencia sus acrílicos y lápices con la textura del amate y la interiorización que da la imagen radiográfica, revitalizando de esa manera a sus personajes. No conforme, pone en evidencia la mecanización a que nos somete la tecnología y el consumismo utilizando piezas de artefactos eléctricos. Este juego de elementos los fracciona, les va creando planos para resaltar la corporeidad, acentuar el dramatismo y configurarles su personalidad. Cada trabajo de Helga, es una obra de teatro, es un libro abierto, una danza incansable o una película de los avatares de la vida, siempre musicalizadas por la necesidad del qué decir”.
¡FELICIDADES!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario