El mural "La historia del teatro" , pintado por Diego Rivera en 1953 para el Teatro Insurgentes ha comenzado a ser montado nuevamente sobre la fachada de inmueble, luego de haber sido sometido a una intensa restauración, informó aquí Gustavo Soto, arquitecto responsable de las obras.En entrevista, el especialista designado por Fundación Televisa para supervisar las obras explicó a Notimex que el montaje de la pieza se realizará de manera paulatina hasta completar las 16 tiras de fragmentos de mural en las que se divide, y no hay fecha para su conclusión.
El montaje de la obra de 47.2 metros de ancho por 11 de altura, realizada en mosaico, corre a cargo de la empresa Sackbe (la misma que restauró la Columna de la Independencia) , cuyos especialistas se encargarán de reinstalar las casi 700 placas que integran el mural.Soto dijo que los trabajos se llevan a cabo bajo la supervisión del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) y de acuerdo con los métodos que ellos mismos han sugerido con la finalidad de que la obra recupere el esplendor que tuvo cuando fue creada.
El arquitecto descartó una fecha exacta para que la obra vuelva a estar en su totalidad en su lugar original, pero estimó que cada una de las hiladas de fragmentos que la integran llevará por lo menos una semana de trabajo.
El mural quedó totalmente restaurado por parte de Centro Nacional de Conservación y Registro del Patrimonio Artístico Mueble (Cencropam) , quien lo dejó listo en noviembre de 2007 y se encargará de realizar supervisiones semanales de las labores.La obra se integra por unas 700 placas de un metro por 70 centímetros, agrupadas en unas 16 hiladas que se irán entregando a la empresa encargada del montaje poco a poco.
En los trabajos de restauración participaron unos 12 especialistas, quienes repusieron los fragmentos de más de 250 tonalidades de mosaico desprendidos de la obra en la que aparece Mario Moreno "Cantinflas" al centro, representado con mosaicos venecianos y bizantinos.
Las labores incluyeron la limpieza total de las placas, la elaboración de un registro de los "pedacitos" de mosaico que se perdieron con el contacto del medio ambiente y el paso del tiempo.
El mural fue pedido a Diego Rivera por una empresa privada con la finalidad de representar la historia del teatro, aunque también aparecen los rostros de caudillos mexicanos como Emiliano Zapata, Miguel Hidalgo y Benito Juárez, así como de los emperadores Maximiliano de Habsburgo y su esposa Carlota.
Dicha obra, trabajada por el muralista por más de un año y por la cual cobró 200 mil pesos, pertenece al teatro, propiedad de una inmobiliaria de la empresa Televisa, misma que ha cubierto los gastos de restauración del mural.
La obra destaca por la variación de tonalidades empleadas por el artista para otorgar rasgos de volumen y sombras a las figuras; además, fue hecho de forma cóncava para observarlo de manera dinámica.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario